El lado noble de la industria sin chimeneas
El Consejo Valuador del Jaguar del Turismo, que preside Rosa Isela García Pantoja, repartió juguetes y alegría a los niños de varias comunidades, como parte de la labor social que realizan cada año, demostrando que la industria sin chimeneas no solo genera trabajos y difusión de nuestra riqueza natural, cultural o gastronómica.
Parte de los 47 niños que asisten al comedor comunitario “Pancitas llenas” de San Luis Sur Dzununcán, comisaría de Mérida, recibieron juguetes, ropa y zapatos, pero más que nada alegría y esperanza con la ayuda que les llevó
Fruto de la cena con causa que organizó el Consejo y la AMIT-Yucatán el pasado 27 de noviembre para la ceremonia de entrega del galardón de este año, y gracias al apoyo de los patrocinadores, la obra social del Jaguar del Turismo llegó también a un grupo de artesanas de la colonia Mercedes Barrera y a niños del Hospital de la Amistad Corea México, también en el sur de Mérida.
Acompañada del contador público Roque Gamboa León y el profesor José Mario Gómez Ventura, integrantes del Consejo, la presidenta de la AMIT-Yucatán llegó con cajas y bolsas para apoyar no solo a los pequeños de “Pancitas llenas”, sino al propio comedor que desde hace seis años ayuda a niños de la calle, en situación de violencia y con problemas familiares, ofreciéndoles dos comidas al día y apoyo en tareas escolares, a fin de encauzarlos por el buen camino.
“Les damos desayuno y almuerzo porque no alcanza para más, pero, primero Dios esperamos que la gente nos siga apoyando para mantener los servicios del comedor y de ser posible darles de cenar, porque queremos seguir ayudándolos. Toda esta obra tiene un motivo: levantar a los niños para el mañana”, afirma María Isabel Pech Yam, quien junto con su esposo Tito Esteban Jiménez, dirigen el comedor.
Para quienes deseen apoyar a “Pancitas llenas”, el predio está ubicado en la calle 86-A No. 516 entre 189 y 191 de San Luis Sur Dzununcán y el celular de María Isabel es el 9993 46-7906. Necesitan despensas, frutas, verduras, carne y otros víveres, además de ropa y zapatos, para estos 47 niños que viven en condiciones precarias.
En el recorrido que realizaron ayer domingo, los directivos del Consejo Valuador visitaron primero al grupo de emprendedoras de la Mercedes Barrera, en el predio No. 749 de la calle 52A entre 123 y 125, a quienes le entregaron herramientas e insumos de trabajo, así como juguetes para los niños.
En ese lugar, surgió un momento muy emotivo cuando una adolescente se puso en la fila para recibir, feliz, una muñeca, ya que, según comentó, nunca había recibido nada con motivo de la Navidad.
El momento fue conmovedor y emocionó a los directivos, quienes no ocultaron su satisfacción por haber llevado alegría a estos pequeños y ayuda a las artesanas, a quienes ofrecieron gestionar un canal de venta para sus productos, en un plan que se concretaría más adelante.
Luego de estar en Dzununcán, la jornada concluyó en el Hospital Corea-México, donde la trabajadora social de turno, Aurora Chan Gómez, recibió los obsequios que se repartirían a los pequeños hospitalizados, para llevarles un poco de alegría a unos días de la Navidad.
Con vehículos propios y sin más ayuda que ellos mismos para realizar la logística, Rosa Isela García, Roque Gamboa y José Gómez, se retiraron contentos y motivados para seguir adelante con la obra social del Jaguar del Turismo, que este año llegó a su cuarta edición.
Los directivos reiteraron su agradecimiento a los patrocinadores y a los comensales que asistieron a la cena con causa, pues con su granito de arena hicieron posible llevar alegría y generar sonrisas en el sur de Mérida.