Mide 6 metros de altura y pesa 800 kilogramos; se busca incentivar el turismo
Con gran entusiasmo y ante un nutrido grupo de asistentes anoche fue develada la estatua de Chaac, el Dios Maya del Agua y la Lluvia en Telchac Puerto.
Se trata de una estatua de 6 metros de altura que pesa 800 kilogramos tallada y modelada por Arte Creativo. Nos ofrece una interpretación artística del escultor visualizando el poder de Chaac.
Con esta pieza se busca incentivar el turismo local, nacional e internacional para detonar la derrama económica y beneficiar a la comunidad de prestadores de servicios turísticos en ese municipio.
El consorcio empresarial Grupo López Rosa, que dirige Gianni Rosa, realizó la donación de esta imponente escultura que tiene como objetivo no solo enriquecer el patrimonio cultural de la región, sino también fomentar el turismo y fortalecer el vínculo con las raíces ancestrales de Yucatán.
Telchac Puerto recibió con mucho respeto y afecto a todo el equipo de Grupo López Rosa, quien expresó que “con esta donación queremos devolver el cariño que el puerto nos ha ofrecido, como empresa socialmente consciente dejamos este legado”, afirmó.
La ceremonia de develación de la escultura y placa contó con la presencia del alcalde de Telchac Puerto, así como representantes de Grupo López Rosa y miembros de la comunidad.
Bajo el lema “El color de tu futuro”, Grupo López Rosa, empresa comprometida con la sociedad, se suma al esfuerzo turístico y cultural de la región impulsando la economía y los beneficios para el puerto.
¿Quién era Chaac en el mundo prehispánico?
Para la cultura esta divinidad es el dios del agua y la lluvia, y también se le relaciona con los relámpagos e incluso con la agricultura.
Esto debido a la relación que tiene para los diferentes ciclos de cultivo. La tradición popular señala que el hogar de esta figura divina eran los cenotes. De acuerdo con distintas investigaciones, Paul Schellhas, un investigador alemán que se especializó en los mayas, lo identificó como el dios B, lo que significaba que Chaac era uno de los dioses más representados en los códices de dicha civilización.
En estos documentos y en algunas esculturas, la deidad aparece con cuerpo humano, cara larga, nariz prominente y colmillos curvos que suelen relacionarse con las serpientes, que en la cultura maya está íntimamente ligada al agua.
En las representaciones que se han hallado, la deidad además lleva una especie de hacha con la que golpea las nubes para ocasionar la lluvia. Este elemento, prevalente hasta la fecha entre los yucatecos, es el que detonó la relación entre la estatua de Poseidón y el supuesto enojo de Chaac.
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